Situada en la cresta de la montaña Yatsugatake, esta casa fue
diseñada por Kidosaki Architects
Studio, se emplaza en un pedazo de tierra que ofrece
unas vistas espectaculares.
De pendiente pronunciada, el terreno permitió la dramática configuración de la casa.
Después de buscar muchos años el cliente dio con el lugar
ideal para construirla.
El objetivo principal de este proyecto era satisfacer las expectativas del cliente por incorporar las vistas impresionantes en el diseño. Cuando los arquitectos visitaron el lugar, su primera impresión fue que esta naturaleza sin explotar y expansiva debe ser aceptada en el interior y en la mayor medida posible.
El objetivo principal de este proyecto era satisfacer las expectativas del cliente por incorporar las vistas impresionantes en el diseño. Cuando los arquitectos visitaron el lugar, su primera impresión fue que esta naturaleza sin explotar y expansiva debe ser aceptada en el interior y en la mayor medida posible.
Se decidió organizar la casa de tal manera que este escenario
ampliado horizontal debía ser maximizado. Para realizar este diseño,
introdujeron columnas para conformar una mega estructura permitiendo a la mitad
de la casa extenderse en el aire.
Al “volar”, la casa permite que todas las áreas públicas, estar/comedor/cocina, disfruten de la vista hacia los tres lados, haciendo disfrutable el paisaje.
Al “volar”, la casa permite que todas las áreas públicas, estar/comedor/cocina, disfruten de la vista hacia los tres lados, haciendo disfrutable el paisaje.
Las habitaciones se abren hacia las montañas, y gracias a la
amplia altura de entrepiso y los aleros pronunciados, se experimenta la
sensación de volar.
Para apoyar esta gran planta colgante, se utilizaron dos refuerzos cilíndricos de acero diagonales, cada uno 300 milímetros de diámetro.
Con esto, la casa logra flotar en el medio de un bello entorno natural.
Con esta estructura en voladizo, la brisa de la meseta de la montaña fluye a
través del interior, logrando una excelente ventilación. Para apoyar esta gran planta colgante, se utilizaron dos refuerzos cilíndricos de acero diagonales, cada uno 300 milímetros de diámetro.
Vale la pena analizar el volumen de concreto sobre el que se desplanta la casa, prácticamente cerrado, con una textura rugosa que parece emerger de la tierra, y el detalle de la losa volada, con una serie de remetimientos que la hacen más ligera. http://noticias.arq.com.mx/Detalles/16869.html#.XJMRDMlKjcc
No hay comentarios:
Publicar un comentario