NOTICIAS GLOBALES

sábado, 19 de enero de 2019

El insomnio aumenta el riesgo cardiovascular

                    Investigadores del CNIC han comprobado en un estudio realizado a trabajadores de una multinacional publicado en el Journal of American College of Cardiology (JACC),  cómo afecta padecer insomnio, dormir menos de seis horas al día o dormir sin tener calidad de sueño a problemas cardiovasculares importantes.
Actualmente el mayor problema de salud mundial aparte del cáncer, son las enfermedades relacionadas con el corazón. La falta de prevención, la falta de
actividad física, la mala alimetación, el tabaco, el alcohol, además del estilo de vida, comprometen a las personas en las edades de riesgo de 35 a 65 años. Al aumentar la aterosclerosis (acumulación de placas en las arterias del cuerpo), así como otras enfermedades vinculadas al riego sanguíneo, se procuran diversas patologías máxime si estas se ven afectadas cuando no existe una buena calidad de sueño.
Las patologías cardiovasculares se incrementan cuando aumentan los factores de riesgo como son los niveles de glucosa, la presión arterial, la inflamación, el estrés y la obesidad. Por otro lado, en el estudio, se refleja cómo la alteración del sueño a lo largo de los días, incluye también en las placas de colesterol de las personas que no duermen bien. De igual forma, se han visibilizado lesiones vasculares subclínicas en una muestra de dos tercios de varones de 45 años de media que no tenían diagnosticada enfermedad cardiovascular alguna.
La investigación ha descubierto que después de considerar los factores de riesgo tradicionales para la enfermedad cardíaca, los participantes que dormían menos de seis horas tenían una probabilidad de un 27% mayor de tener aterosclerosis en todo el organismo, en comparación con los que lo hacían de siete a ocho horas. Además, aquellos que tenían una mala calidad de sueño tenían una probabilidad de un 34% mayor de tener aterosclerosis, en comparación con aquellos que tenían una buena calidad de sueño.
En todo caso, los investigadores pudieron comprobar que la calidad de sueño definida por la frecuencia con la que una persona se despierta durante la noche así como la intensidad de sus movimientos, reflejan las diferentes fases por las que atraviesa a lo largo de las horas. Por otro lado, en mujeres, que duermen mucho, el exceso de horas, más de ocho, aumentaba de igual forma el riesgo de aterosclerosis si la paciente tiene colesterol. Esto supone que se debe dormir y descansar un máximo de ocho horas seguidas sin interrupciones siempre y cuando se tenga una buena alimentación y una calidad de vida asociada a ello. De no ser así, el riesgo grave de desarrollar enfermedades asociadas al corazón es muy alto.
Padecer insomnio, levantarse por la noche, no tener calidad de sueño es un riesgo importante para la salud cardiovascular.

No hay comentarios:

Publicar un comentario