La Organización Internacional del Trabajo fue fundada
el 11 de abril de 1919, en virtud del Tratado de Versalles, este año cumplirá
100 años. Es un organismo especializado de las Naciones Unidas que se
ocupa de los asuntos relativos al trabajo y las relaciones laborales.
La Comisión organizadora de la OIT, estuvo
presidida por Samuel Gompers, presidente de la Federación Americana del
Trabajo (AFL), estaba compuesta por representantes de nueve países: Bélgica,
Cuba, Checoslovaquia, Francia, Italia, Japón, Polonia, Reino Unido y Estados Unidos.
Es una organización tripartita, la única en su
género con representantes de gobiernos, empleadores y trabajadores en sus
órganos ejecutivos.
La fuerza que impulsó la creación de la OIT fue
provocada por consideraciones sobre seguridades humanitarias, políticas y
económicas.
La Conferencia Internacional del Trabajo es el
órgano superior de la OIT. Se reúne anualmente, en junio, en Ginebra, Suiza.
Está integrada por cuatro delegados de cada país miembro; dos de ellos elegidos
por cada gobierno, y los otros dos representantes de las organizaciones
de trabajadores y empleadores respectivamente.
Al sintetizarlas, el Preámbulo de la Constitución
de la OIT dice que las altas partes contratantes estaban “movidas por
sentimientos de justicia y humanidad así como por el deseo de asegurar la paz
permanente en el mundo...”Considerando que la paz universal y permanente sólo
puede basarse en la justicia social;
Considerando que existen condiciones de trabajo que
entrañan tal grado de injusticia, miseria y privaciones para gran número de
seres humanos, que el descontento causado, que constituye una amenaza para la
paz y armonía universales; y considerando que es urgente mejorar dichas
condiciones;
Considerando que si cualquier nación no adoptare un
régimen de trabajo realmente humano, esta omisión constituiría un obstáculo a
los esfuerzos de otras naciones que deseen mejorar la suerte de los
trabajadores en sus propios países.
Al principio las normas se centraron en las
condiciones de trabajo: el primer Convenio de 1919 se refiere a las horas de
trabajo, las famosas ocho horas diarias y cuarenta y ocho semanales.
Las áreas que podrían ser mejoradas enumeradas en
el Preámbulo continúan vigentes, por ejemplo:
· Reglamentación
de las horas de trabajo, incluyendo la duración máxima de la jornada de trabajo
y la semana;
· Reglamentación
de la contratación de mano de obra, la prevención del desempleo y el suministro
de un salario digno;
· Protección del
trabajador contra enfermedades o accidentes como consecuencia de su trabajo;
· Protección de
niños, jóvenes y mujeres.
· Pensión de vejez
e invalidez, protección de los intereses de los trabajadores ocupados en el
extranjero;
· Reconocimiento
del principio de igualdad de retribución en igualdad de condiciones;
· Reconocimiento
del principio de libertad sindical;
· Organización de
la enseñanza profesional y técnica, y otras medidas similares.
La primera Conferencia Internacional del Trabajo
celebrada en Washington, Estados Unidos, en octubre de 1919 adoptó seis
Convenios Internacionales del Trabajo, que se referían a las horas de trabajo
en la industria, desempleo, protección de la maternidad, trabajo nocturno de
las mujeres, edad mínima y trabajo nocturno de los menores en la industria.
En esa Conferencia participó José Eugenio Kunhardt,
dominicano, quién lo hizo como asistente de Samuel Gomper, Presidente de la
AFL, de Estados Unidos. La República Dominicana no podía participar porque
estaba ocupada por las tropas de los Estados Unidos.
La OIT estableció su sede en Ginebra en el verano
de 1920 con el francés Albert Thomas como primer Presidente de la Oficina
Internacional del Trabajo, que es la secretaría permanente de la Organización.
Con gran ímpetu impulsó la adopción de 9 Convenios Internacionales del Trabajo
y 10 Recomendaciones en menos de dos años.
La Corte Internacional de Justicia declaró que el
ámbito de acción de la OIT se extendía también a la reglamentación de las
condiciones de trabajo del sector agrícola.
En 1925 fue creado el Comité de Expertos como
sistema de supervisión de la aplicación de las normas de la OIT. El Comité, que
aún existe, está compuesto por juristas independientes responsables del
análisis de los informes de los gobiernos y de presentar cada año a la
Conferencia sus propios informes.
El Dr. Rafael Albuerquerque, de la República
Dominicana ha sido uno de esos expertos.
El británico Harold Butler, sucesor de Albert
Thomas desde 1932, tuvo que enfrentar la Gran Depresión y su consecuencia de
desempleo masivo.
Estados Unidos se convirtió en Miembro de la OIT en
1934, aunque continuaba fuera de la Sociedad de las Naciones.
El estadounidense John Winant asumió el cargo en
1939 cuando la Segunda Guerra Mundial era inminente. Por motivos de seguridad trasladó
la sede de la OIT en forma temporal a Montreal, Canadá en mayo de 1940.
El irlandés Edward Phelan, que había ayudado
a escribir la Constitución de 1919 y desempeñó otra vez un papel importante
durante la reunión de Filadelfia de la Conferencia Internacional del Trabajo
realizada en medio de la Segunda Guerra Mundial, dirigió la OIT, en la
cual participaron representantes de gobiernos, empleadores y trabajadores de 41
países.
En 1946, la OIT se convirtió en una agencia
especializada de la recién creada Organización de las Naciones Unidas.
En 1948 la Conferencia Internacional del Trabajo
adoptó el Convenio No. 87 sobre la libertad sindical y la protección del
derecho de sindicación.
El estadounidense David Morse fue Director General
entre 1948 y 1970, período durante el cual se duplicó el número de países
miembros.
La OIT creó el Instituto Internacional de Estudios
Laborales con sede en Ginebra en 1960 y el Centro Internacional de Formación en
Turín, Italia, en 1965.
Durante la dictadura de Trujillo los trabajadores
eran representados en las Conferencias de la OIT por delegados escogidos
por el gobierno, todos miembros del Partido Dominicano, del dictador.
En 1962 participó con representantes de los
trabajadores, el sindicalista Henry Molina, que tenía 21 años, en
representación de la Confederación Autónoma de Sindicatos Cristianos (CASC);
además quedó incluido en la Comisión de Seguridad Social de la OIT.
La Organización ganó el Premio Nobel de la Paz en
su 50 aniversario en 1969.
Entre 1970 y 1973, con el británico Wilfred Jenks
como Director General, la OIT avanzó en el desarrollo de normas y de mecanismos
para la supervisión de su aplicación, en particular en la promoción de la
libertad sindical y la protección del derecho de sindicación.
El francés Francis Blanchard, extendió la
cooperación técnica de la OIT con países en desarrollo, Los Estados Unidos se
retiraron de la OIT desde 1977 hasta 1980.
En 1978 el gobierno dominicano, presidido por
Antonio Guzmán decidió que las organizaciones sindicales fueran las
representantes de los trabajadores, se designaron representantes de la CASC, la
CGT y la CNTD.
El Secretario de Estado de Trabajo Dr. César
Estrella Sadhalá representó al gobierno dominicano. José Gómez Cerda, fue
miembro titular y Fernando de la Rosa, miembro técnico, quienes
representaron a los trabajadores dominicanos . Además se acordó que la
representación de los trabajadores fuera rotativa entre las tres principales
organizaciones sindicales.
La OIT desempeñó también un papel importante en la
emancipación de Polonia de la dictadura comunista, al darle su apoyo total a la
legitimación del sindicato Solidarnosc basándose en el respeto del Convenio No.
87 sobre libertad sindical, que Polonia había ratificado en 1957.
El problema migratorio haitiano en la República
Dominicana se inició en la década de los 80, en la OIT, un caso por
violación de derechos laborales de los cortadores de caña haitianos y al
denunciarse las condiciones de los bateyes azucareros estatales.
Se comprobó que braceros haitianos eran trasladados
de los ingenios que los habían contratado a otros, y en muchos casos a empresas
privadas, sin la autorización de ellos, lo cual la OIT considera que es un
trabajo esclavo.
El Estado dominicano operaba un consorcio de 12
ingenios (CEA) y era el mayor empleador de braceros, contratando con el
gobierno de Haití los términos para su reclutamiento, remuneración y
repatriación al finalizar la zafra.
Una comisión de encuesta de la OIT vino al país en
1981 y 1983, recomendando medidas sobre contratación, traslado, formas de pago,
sindicalización, residencia temporal, a las cuales una comisión de expertos del
organismo dio seguimiento durante la década.
Michel Hansenne de Bélgica asumió el cargo en 1989
y condujo la OIT después del fin de la Guerra Fría..
El 4 de marzo 1999 el chileno Juan Somavia asumió
el cargo de Director General.
Somavia planteó la importancia de convertir el
Trabajo Decente un objetivo estratégico internacional y de promover una
globalización justa. También destacó el trabajo como un instrumento para
la superación de la pobreza y el papel de la OIT en el logro de los Objetivos
de Desarrollo del Milenio, que incluyen la reducción de la pobreza a la mitad
para 2015.
El británico Guy Ryder fue elegido como el décimo
Director General de la OIT en mayo de 2012. En noviembre de 2016 fue reelecto
por otros cinco años.
La República Dominicana fue admirada en la OIT
cuando presentó un Código de trabajo que había sido modificado por medio de la
conciliación y el consenso de las tres partes de la producción, que son el
gobierno, los empleadores y los trabajadores.
La OIT ha jugado un importante papel en la
orientación, educación y acción de los trabajadores en todas partes del mundo José Gómez Cerda
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